Hemos extrañado
un apretón de manos,
un abrazo,
un abrazo,
un beso
y un saludo.
Hemos extrañado a la gente
y un saludo.
Hemos extrañado a la gente
con las calles vacías,
el cafecito de la esquina
el mate del amigo
el cafecito de la esquina
el mate del amigo
y compañero.
Hemos extrañado los parques,
los bares
y teatros,
el paseo del perro
y las caminatas
de los domingos
Hemos extrañado los parques,
los bares
y teatros,
el paseo del perro
y las caminatas
de los domingos
en la plaza.
¡Cuánta extrañeza!
Distancia y tiempo
anidaron la soledad del mundo,
anidaron la soledad del mundo,
y el mundo pareció desierto,
los viajeros se habían ido,
los viajeros se habían ido,
y desnuda se quedo la noche
y con miedo.
Pero los ausentes
y con miedo.
Pero los ausentes
¿quién los extraña?
Un viento en revuelo,
disuelve las cenizas anónimas
y muerde mis pensamientos.
Desde estas puertas anquilosadas
donde ya nada me parece,
oigo las campanas
oigo las campanas
de una iglesia vacía,
tocando en el silencio del alma,
tocando en el silencio del alma,
miro hacia arriba
y se me cae el cielo
como una piedra confinada
al recuerdo del olvido
Una rosa
una fosa
y una lágrima
no son para decir adiós
por que nadie
se extraña ni muere
con sus muertos
cuando los recuerda
con amor.
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